Curriculum. El GPA (nota media) depende de la institución, y puede ser desorbitadamente alto para Universidades como Berkeley o Harvard. No es raro que el GPA procedente de High Schools no americanas sea visto con escepticismo, aunque existe el convencimiento general en los departamentos de admisiones que los extranjeros gozan de una excelente preparación.
TOEFL. El TOEFL mide el dominio del idioma inglés del alumno. Su dificultad es media-alta, y depende de la institución a la cual se opte, puede ser un gran impedimiento. Se puede tomar este examen unas seis o siete veces al a&nacuteo, depende de la ciudad en que se desee tomar. Se recomiendan -al menos- 550 puntos para acceder a una buena Universidad. SAT. El SAT es un test que pretende medir la capacidad intelectual del estudiante, y es impartido, como el TOEFL, por el ETS (Educational Testing Service). La dificultad media del SAT es baja, y no suele suponer un problema para aquellos estudiantes motivados para estudiar en el extranjero. Hay que tener en cuenta que es un requisito indispensable, pero
Suerte. Las Universidades mas famosas admiten aproximadamente un 20% de todos los estudiantes que solicitan el ingreso. El proceso de admisión no es muy refinado -por cuestión de tiempo-, y excelentes expedientes se pierden en el camino. La solución para ello es simple: Solicitar el ingreso a diversas Universidades simultaneamente, y escojer posteriormente.
Dinero. Salvo casos excepcionales, no hay ningún tipo de ayuda financiera para realizar la licenciatura. Ni para ciudadanos americanos, ni mucho menos para extranjeros. El precio de las matriculas es absolutamente desorbitado. En lo que a un estudiante extranjero le concierne, Universidades privadas y públicas son lo mismo, por cuanto no es elegible para ningún tipo de beca, ni tiene rebaja por ser residente en un estado determinado
La financión para un master debe ser familiar o de una institución en el país de origen. No hay becas para masters por regla general, aunque hay contadas excepciones.
Recalcar por último que aunque sobre el papel se ofrezca un master para todas las disciplinas, en ciencias y letras puras, el título de master está devaluado, siendo recomendable proseguir hasta el doctorado.
Las cartas de recomendación deben ser de cierto peso, y para las Universidades más prestigiosas, cierta experiencia de laboratorio o investigación es también necesaria. Sin embargo, el GRE es el factor de más peso (dada una nota aceptable del TOEFL, sin la cual la solicitud ni se procesa).
Requisitos adicionales se piden para cada disciplina. Para el MBA, dos años de trabajo son especialmente recomendados. Tener una beca del país de origen también ayuda enormemente a asegurar la admisión. Aunque el aplicante demuestre solvencia económica, tener una beca demuestra cierta iniciativa que se tiene en cuenta a la hora de revisar la aplicación. Para el MD, son necesarios dos exámenes, de carácter teórico y práctico de convalidación. La admisión a una Medical School es sin duda alguna la más dura y difícil. El MCAT no es trivial, y necesita mucha preparación previa.
Es importante saber que Estados Unidos no cuenta con una licenciatura en Medicina o en Abogacía, sinó que los aplicantes deben contar con una licenciatura previa (típicamente en Química o Biología para el MD, y Literatura o Psicología para el JD), y solicitar el ingreso posteriormente en la escuela profesional (Medical School o Law School).
El precio es el mayor escollo. Cada año puede salir (sólo en matrícula) por más de $25.000.